Death Cab For Cutie: Codes & Keys – Los códigos y las claves de una gran banda

El panorama de la música independiente en Estados Unidos esta llena de músicos y bandas con gran talento, eso lo sabemos todos, pero entre toda esa constelación de talentos indie solo hay unos pocos capaces de hacernos sentir sensaciones especiales al escuchar su música. Ese es el caso de la banda de hoy, Death Cab For Cutie, el principal proyecto musical liderado por  Ben Gibbard y su enorme talento musical. Codes & Keys es su octavo larga duración, publicado el pasada mes de mayo de 2011 y que ha sido acogido de manera un tanto desigual por parte de la crítica especializada; resulta evidente que aunque ya han pasado bastantes años desde que los Death Cab For Cutie lanzaron el extraordinario Trasatlaticism todavía hay gente que cae en la comparación fácil y acaba quejándose de que Codes & Keys no llega a alcanzar el nivel de calidad de este y que tampoco tendrá el mismo impacto en la escena indie, lo cual no se puede negar, pero eso no quita que Codes & Keys sea un gran disco y que deba ser valorado en su justa medida y en el contexto actual, sin los prejuicios derivados del pasado. Death Cab For Cutie es uno de los grupos que mejor ha sabido integrar los sonidos electrónicos en el rock independiente de la última década; esos mismos sonidos que han ganado todavía un poco más de protagonismo en este álbum restándoselo a las guitarras, lo que se ha traducido en un cierto acercamiento al pop y un considerable suavizado de las melodías. Para ilustrar la entrada nada que mejor que escuchar un par de canciones como es habitual, por supuesto el primer sencillo extraído de Codes & Keys, You Are a Tourist:

 

 

Esta es una de las canciones más contundentes del disco, el que más conecta con sus anteriores trabajos. Como curiosidad deciros que el videoclip ha sido rodado en directo y de una sola toma, con toda la dificultad que ello conlleva; me gustaría saber cuantos intentos necesitaron para conseguirlo…

 

Como segunda canción para la entrada, me he decidido no por el segundo sencillo extraído del disco, Home Is a Fire, si no por St. Peter’s Cathedral, canción que es realmente todo un templo sonoro, tan enorme como la Basílica de San Pedro…:

 

 

Seguramente no va a ser la canción más popular del disco, pero para mi es la verdadera joya. Aquí os dejo también la maravillosa letra que la acompaña, un fascinante reflexión fruto de lo impresionado que quedó Ben Gibbard tras visitar el Vaticano

 

St Peter’s cathedral
Built of granite
Ever fearful of the answer
When the candle in the tunnel
Is flickering and sputters
And fading faster
It’s only then that you will know
What lies above or down below
Or if these fictions only prove
How much you’ve really got to lose

 

At st Peter’s cathedral
There is stained glass
There’s a steeple that is reaching
Up towards the heavens
Such ambition never failing to amaze me
It’s either quite a master plan
Or just chemicals that help us understand
That when our hearts stop ticking
This is the end
And there’s nothing past this

 

There’s nothing past this
There’s nothing past this
There’s nothing past this
There’s nothing past this

 

Hasta la próxima entrada!

 

Pepe
Últimas entradas de Pepe (ver todo)

Deja un comentario

dos × 4 =

Youtube
Youtube
Instagram